Gustavo Torner llega a Cáceres con una exposición que recupera las fotografías de 1955 junto a dos series de pinturas y esculturas realizadas en 2005, en una amplia perspectiva en el tiempo de la obra de este conquense, una de las figuras más importante del panorama artístico español.

Gustavo Torner (Cuenca, 1925), es una figura clave para comprender el desarrollo de la plástica española desde la mitad del siglo XX a nuestros días. Artista polifacético, de pequeños y deliciosos papeles y de monumentales esculturas, de pintura vanguardista y de decorados sublimes, hombre de letras, culto y cosmopolita es uno de los introductores de la modernidad tras la guerra en España.

La exposición, comisariada por José María de Francisco, nos muestra estas series de fotografías tomadas en negativos de blanco y negro de seis por seis en 1955. Gracias a la precisión de su catalogador, Arturo Sagastibelza, dichos negativos se conservan en excelente estado ya que casi no han visto la luz en estos cincuenta años. De las treinta fotografías que presenta esta edición, catorce se han expuesto en la retrospectiva que el Reina Sofía le dedicó a Torner en 1991. Bajo la mirada del espectador puesto al día en arte contemporáneo, estas fotografías, y los gouaches y esculturas que completan la exposición, nos confirman la inquebrantable actitud de un artista que desde hace más de cincuenta años nos muestra su natural e inevitable, audaz, premonitoria e inteligente modernidad”.